Amado Padre que estás en Gloria, en éste nuevo día vengo a ti con un corazón humillado y dispuesto, para suplicarte que tomes el control de mi vida para hacer tu voluntad y que ésta semana que inicia sea plena de tus bendiciones, que me concedas sabiduría y entendimiento para enfrentar las pruebas que vengan, confiado y tomado de tu mano poderosa.
Amoroso Señor, te ruego que derrames abundantes bendiciones en la vida de mi familia, de mis amigos y amigas, de mis seres amados, de mis enemigos y de todas las personas que te amamos y confiamos en ti Padre celestial, en tu Espíritu Santo que vive en nosotros y en tu hijo bendito Jesús, que es nuestro salvador personal.
Te doy las gracias Padre celestial, por la vida, por mi familia, por mis hijos, por mis nietos, por mi trabajo, por mi iglesia, por mis amigos y amigas, por mis negocios, por mi patria, por todos los bienes materiales y los dones espirituales que me has regalado. Te suplico que me protejas de todo peligro, de toda maldad y cosa maligna que venga sobre mi y en el nombre de Jesús me declaro victorioso en todo lo que emprenda ésta semana.
Ayúdame padre Celestial a ser cada día un mejor hijos tuyo, a ser mejor discípulo de tu Hijo Jesús y a dar testimonio día con día, de tu infinito amor y tus misericordias que son nuevas cada día. Te ruego señor que atiendas mi suplicas, porque todo te lo pido en el nombre de precioso de tu hijo amado Cristo Jesús. Amén.
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